OLAS

  Cuando me besas, Siempre quiero más,   Y surge el deseo, Y no puedo parar…

  Ese silencio Que te conturba. El amor que te consuela. El camino Que nos lleva más allá… Y el corazón Que sigue latiendo Y la vida que sigue huyendo. Ese silencio, Ese amor, Ese amor,   Miguel!

  Me paseo por tu piel Como si fuera un paisaje Y mis ojos te contemplan Felizmente  soñándote, Me paseo por tus besos  Y descubro la sonrisa De la luna en tu ventana. Me paseo por tus manos Que me acarician el alma. Regalándome la paz Y la luz, Y el mar en calma…  

Te regalo esa nube Te regalo mis besos El tiempo que me queda. Y la luna creciente Rodeando la noche, Al acecho del alma. Te regalo la flor Que asoma en la ventana Y el trino de los pájaros En la mañana. Cuando todo es silencio. Cuando todo está  En calma…  

  La vida no   era eso, Porque nó, Porque sí, Porque, Hasta luego. No me convence, Pero la amo. ¡La vida!

Nadie lo dice, Estás en boca de todos, Un secreto a voces. Es así,  Y ella lo ama, A pesar de todo. Todos callan, Consienten, Mantienen silencio. Es un “ amor particular” Como dice Lluis Llach, Especial…  

Suena como una lágrima Líquida, Como un beso. Redonda como la luna. Rueda por la piel  Y me acaricia. Llanto y mar  Como un torrente Río abajo. Así va mi pensamiento, Buscándote En las palabras, Y a veces, Solo a veces, Te encuentra.  

  Los olvidos Son paraguas abiertos, Quemándose en el balcón.

  En vez de hincharme A pastillas, Me hincho a escribir, ¡Sano y barato.!

Ese caos ordenado Que subsiste a mi pesar. Esa luna  Que no brilla, Asomando al palomar. Silenciosamente Ausente. Esa perfumada brisa, Que me invade  Y me libera Acariciando la piel. ¡Así, cualquiera…!  

    La niebla Me empaña las gafas, Casi no veo el camino. Suerte, Que me lo sé de memoria.

    SILENCIO   Es la música del piano, Mueve la cortina del balcón. No es el aire, Es el silencio. Y la gaviota Vuela lejana. Solo un instante; La belleza…  

  ALMA DE ESCALERA   Bajar resbalando Por la barandilla de tu alma, Deslizarme por tu piel Al ritmo del aceite En las manos, Suspirando… Esta mañana, Limpia y soleada. Porque ayer, llovió.  

Eres mi costumbre El sueño De una noche de verano Y de pronto, Dejas de llamarme. Eres mi cariño El pozo de mis lágrimas. Y de pronto Te vas. No quieres verme, Ni mis besos Y caricias… A pesar de todo Eres mi costumbre.  

En esa noche oscura Tan lejana, Sin luna, Sin verte Sin verla. Asomo al balcón, Que la espera conmigo…  

  Algún día, contaré el amor Dibujándote el silencio, Que no sabe de formas Aunque sí de gestos. No suena, Pero   sueña; Lo escucho   En las noches frías y oscuras… Menos tus manos   Que escriben en mi sexo, ¡Tantas cosas!

  A la melodía, Se llega, por la armonía Y el ritmo. Con la poesía Ocurre lo mismo, Al final, es música.

    Dame a beber Tu silencio Amoroso Y nocturno. Dame a beber La mirada Que no huye Y la ausencia…

  Después de cada Tiempo, Quedó escrito   Tu nombre, Más no la certeza   De tenerte.

  Eres mi mar Mi paisaje Mi consuelo. Los besos, Y el cielo…

  Cómo te buscan Mis sueños Porque   ya no me entretienes Con tus manos. Solo silencio,   Y espero…