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Mostrando entradas de agosto, 2021

SIENTO...

  Siento la oscura dicha de estar viva…

LUNA CERCANA

Luna oculta en mi pensamiento, redonda te amo. Luna , excusa en el viento, ven a mi lado, te siento… Luna cercana,  y el tiempo.  

LUNA DE AGOSTO

  Luna de agosto redonda En tu patio se pasea. Luna mía, me rodea, Con su cara de alegría, Sonreía… Luna de agosto amarilla Te compré una sombrilla Por un beso que me des. Amor, te sueño en la orilla; Por si vienes y me ves…  

CERTEZAS

  CERTEZAS. Ni una,   la duda se cierne aterradora sobre nuestras cabezas, cual monstruo inenarrable, persigue nuestra piel, que embozada e impotente, asiste al espectáculo. Sin ninguna opción a réplica. Sólo obediencia ciega. No hay respuestas; esa es la respuesta, Esa es la certeza.  

BESOS

Besos azules suspiran Por tu boca se deslizan. Besos por verte mirar, Dulce como la sonrisa, De la tarde ya sin prisa. Besos de luna redonda, Besos de mar, boca arriba; Sábanas blancas al sol, De tu piel que así me mima. Besos que ruedan rodando, Resbalan a la deriva. Felices besos de noche,  Las sal del amor, saliva…! Besos que dicen y cantan, El deseo en su venida. Besos que son zapatillas nuevas, De andar l por la vida.  Besos y versos al fin, Que dejas en mis mejillas…!  

ME PILLÓ LA LLUVIA.

  Me pilló la lluvia ,sin paraguas fina , dulce, suave, como un beso…   Despacio me mojó sin pausa. Caricias. Me pilló la lluvia y en silencio, amanecía…

BESOS

Se limpia el corazón a besos. Te lo juro, no hay quien pueda con ellos…  

PARAGUAS

PARAGUAS.   Cada vez que vienen a verme los amigos , y llueve, olvidan el paraguas. Con lo cual, al cabo del tiempo, me hice con gran cantidad de ellos. Do variopintos colores y distintos tamaños; plegables, no plegables, con empuñadura, sin ella, grandes, pequeños, de " los chinos," o de los caros.   Recuerdo que me dejé uno, en un banco de la estación de Sants. La verdad, me dolió, le tenía mucho cariño, era de los buenos, de color azul. Habíamos vivido muchas cosas juntos.   He de decir que los olvidos en mi casa, se debían a que al cabo de unas horas dejaba de llover, de lo contrario hubiesen vuelto a buscarlos.   Con el tiempo, hice tal acopio de ellos, que abrí una tienda de paraguas bastante singular, y con mucha clientela.   Hay que ver lo que hace la depresión atmosférica.