OLAS

Cuando esto termine, acabaremos todos hechos unos melenudos. Ja,ja,ja,ja, como los indígenas afortunados del Amazonas, que si aún quedan, seguro que no les ha pillado la pandemia. El negocio de las peluquerías se viene abajo, entre otros. Si la humanidad no aprendemos de ésta, es que no merecemos serlo. La luz, el agua, y el gas,aumentan sus beneficios; con la de horas que estamos en casa. Hoy cambian la hora a las 2 serán las 3 (una hora menos) y en Canarias 2h. Hay un aluvión de chistes sobre el tema vírico; la risa, que no acabe nunca, de lo contrario enloqueceremos. Los historiadores se pondrán las botas. Me vuelvo a dormir son las 5 y media de la mañana y llevo un rato escribiendo. Hace frío.

18 Qué pasará esta primavera extraña? Suerte que al salir a comprar, el jardín del portal, me indica que ya está aquí; las rosas florecen…No veo al jardinero fiel, Enrique, que es quien cuida con mucho mimo, esa pequeña parcela de belleza y perfume. Algo he de hacer con los silencios, me pondré a hacer ganchillo de nuevo; ya lo hice mientras esperaba el nacimiento de mi primer nieto, ya hace casi 6 años. Creo que aún tengo ovillos, haré una bufanda para mis familia, amigos y hasta para los gatos…

Estoy en un mar de dudas, al final no sabré si tengo el virus o no, si me contagié, o solo un poquito, si me he salvado por chiripa, dado que soy paciente de riesgo ,o posible portadora. Por la red, surgen toda serie de gurús y adivinos de pacotilla, bulos a montones, fake news, malos augurios…; Ni caso. La economía se va al garete, bueno, para los pobres. Los ricos hacen negocio, con las medidas de protección( mascarillas ,guantes, etc.) en fin lo de siempre la parte depredadora de la humanidad, en su peor expresión. Me han llamado amigos y amigas que hacía años no sabía de ellos, interesándose por mi salud. Yo también lo he hecho. Estoy viva? Si, si, lo estoy y espero que por muchos años.

DIA 16. (RELATOS CONFINADOS) He de enfrentarme al teclado del portátil como sea, cual a un animal salvaje, un leopardo por ejemplo.  Es una cuestión práctica, de ahorro de energía y tiempo, pero con la que está cayendo, lo que sobra es tiempo. En fin , lo intentaré; de momento solo es una declaración de intenciones;porque son las 5 de la mañana, y estoy escribiendo a mano, en la cama. Al paso que voy, me quedaré sin bolis y sin cuadernos, y con la tienda de los chinos cerrada, no sé yo donde encontraré esos utensilios tan necesarios para mi… en este tiempo de reclusión y pandemia.  A lo mejor en el kiosko. Maldito virus! Menos mal que aún me quedan media docena de lápices , y a malas, rendirme a la fiera y agarrar el teclado por banda, peleándome con él a pecho descubierto. Al final le ganaré la partida. Querido Leopardo.

RELATOS   CONFINADOS. COVID-19 .DIA 8 1 Por donde empezar… Por el final, que es muy incierto. Las hormigas se preparan para el frío y la lluvia, una tras otra en fila india, van donde está el cadáver de la lechuza, agarran un minúsculo pedacito de su cuerpo y ordenadamente vuelven al nido. Son previsoras, esto les permite sobrevivir, cuando llegan malos tiempos. Esa es la metáfora. No están desnudas como nosotros, y mira que tienen poco cerebro, no como los humanos .Su instinto de supervivencia, su olfato son muy poderosos. Qué decir de los lobos, que una semana antes de tsunami, subían a las montañas ante la atónita mirada de los habitantes de las zonas costeras Nosotros, somos primates engreídos e ignorantes, expuestos a las catástrofes, indefensos y frágiles. Me gustaría ser como los animales; sufren menos. 2 He perdido la noción del tiempo, no sé en qué día estoy, ni sé si es martes 20 o domingo 25, esto es grave; no veas lo que me queda. Para desahogarme, v

DÍA 4 CONFINADOS.(COVID-19) No sé si poner las noticias, sé que son malas, el número de muertos e infectados, aumenta exponencialmete. Los comunicados médicos, son apocalípticos. Estoy confinada, no quiero emparanoyarme más. Los sicólogos de turno, son gurús, nos aconsejan calma, pero saben que no es posible. Apago la tele, me pongo música clásica, Schubert… en su compañía, doy paseos a lo largo de los 10m. del comedor, me asomo al balcón; las calles están vacías y pavorosamente silenciosas. No hay coches ,ni un alma. Vuelvo dentro, cojo de nuevo a Robinson Crusoe y sigo leyendo.

CONSTANTINO (COVID-19) Cuando mi amigo el griego, periodista free-lance, que vive en Lesbos, lleva diez días si salir en Facebook, pienso mal. Estará enfermo?Tendrá el virus? Visita a menudo el campo de refugiados, y escribe crónicas de lo que ocurre allí. No tengo su teléfono; ignoro si le ha ocurrido algo. Estoy inquieta; no quiero ni pensar lo que los habitantes de los campamentos deben estar pasando. Si antes se hablaba poco, ahora con la pandemia, se han esfumado por completo. Eso son las consecuencias; desaparecen los más débiles… ¡Ah coño, era eso.! 18-3-2020

RITUALES BÉLICOS (COVID-19) Como dice el francés, es una guerra… Ni en mis peores días, imaginé que viviría una pandemia como esta. En la cola del súper; con mascarilla y guantes; haciendo cola para entrar. La cajera, que por cierto no reconozco de lo tapada que va, nos ordena que entremos de tres en tres . Nos mantenemos a 1m. de distancia.(Lo dice la ley), me encuentro con mi vecino José y hablamos a gritos, intentamos bromear sobre lo que ocurre; huele muy mal. El enemigo invisible acecha y como me acerque demasiado, me comerá; no el amigo sino el invisible. Me subirá la fiebre, toseré, entonces vendrán los sanitarios vestidos de buzo y se me llevarán a la UCI, cual apestada. Allí al cabo de unas semanas, habré sobrevivido, o no. En el mejor de los casos, aislada en una habitación y después de quince días, me darán el alta y a casa. A seguir encerrada, con mis incertidumbres, mis libros, mis poemas… Sin atreverme a salir, por no revivir la pesadilla. Allan Poe

Cayeron todas las hojas, y parecía mentira. El viento lo desnudó. Cayeron todos los besos y con el aire en los labios, el verso se me escapó.

Sonoros, silenciosos, mojados, salados, dulces, repentinos, esperados, deseados, inesperados,   de noche, cuando amanece, de compromiso. Azules o de luna, de mar,   en el coche, al despedirnos, al encontrarnos en el camino… esos, los besos!!