EL PERRO COJITO,EL HOMBRE LIGERO Y YO.
Amanecía, Iniciaba mi diario paseo por la Avenida de Vallbona.
Llovió la noche anterior, el suelo dejaba señales de agua y barro,
algunas hojas amarillas y mojadas soñaban en un rincón…
Como siempre, andaba ligera, recordando en silencio, cosas íntimas
que no vienen al caso.
De repente, recordé a un tipo al que días anteriores, me encontraba
a la misma hora en que yo iba y él volvía.
Era un hombre de mi edad, con una camiseta roja, tejanos y zapatillas
rojas, que andaba, o volaba, seguido de un perro chiquito y cojo, pero que, misteriosamente,
no perdía a su amo.
La imagen, me inspiró sorpresa y ternura.
Ese amor cojito y fiel, que no pierde comba ni hilo…
Pensé en escribir algo sobre ellos.
Hoy , me encuentro andando
hacia la Trinidad y a mitad de camino, me adelantan el hombre ligero y el perro
cojito.
El hombre ,me saluda:”Buen día, buen paso lleva usted!!!”, y les
contesto, “Buen día, y vosotros también”, él me mira sonriendo y alejándose, les
pierdo en la distancia.
El perro, de vez en cuando, se giraba para ver que les seguía…
Comentarios
Publicar un comentario