RELATOS CONFINADOS. 63


Intento imaginar como será el primer abrazo con mi nieto, después de tantísimos días sin poder hacerlo. Será fuerte, dulce, interminable, seguro!

Me saltan las lágrimas…

La ternura en la mirada, cuando por la pantalla nos decimos adiós.
Sin entender porqué, sin entender nada.

Intento imaginar los besos que deseo dar, dulces, largos, desmesurados…

Intento imaginar un largo paseo por la playa, deslizando mis pies descalzos por la arena mojada, sumergirme en el mar, que nos espera.

Celebré mi cumpleaños confinada, sola, sin pena ni gloria… Mi hijo y mi nieto me hicieron un pastel con velas y todo; y a través de la pantalla soplé las velas. Pero el pastel se lo zamparon ellos. Yo salivando y muriéndome de ganas de probarlo, y de besarlos.

He de celebrar los setenta de mi hermana; los hizo la semana pasada. Nos juntaremos todos los hermanos en un picnic increíble!

Tengo pendiente una comida con mi amiga Pilar; la tuvimos que aplazar por culpa del puto virus.

Demasiadas cosas pendientes, se me acumula la agenda con las citas y deseos…!

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